martes, 9 de febrero de 2021

EL MURO DE LOS FALLOS PROPIOS NOS CORTÓ EL BUEN CAMINO


El Real Betis
cayó derrotado en la jornada número 22 frente al FC Barcelona por 2 goles a tres en el Benito Villamarín. Los de Pellegrini se pusieron por delante en el marcador con gol del renacido Borja Iglesias. Messi, que empezó el partido en el banquillo, empató el partido en la reanudación, Víctor Ruíz en propia meta hizo el segundo de los visitantes y también el empate a dos del Betis. Un despiste a falta de tres minutos para el final del propio Víctor Ruíz, propiciaba el tercero del Barça por parte del portugués Trincao. Los fallos defensivos volvieron a dejar al Betis sin premio en un partido en el que llevó la voz cantante en muchos tramos del mismo y se vio a merced del rival, sobre todo con la entrada al campo de Messi, en otros tantos. Llega así la primera derrota de este 2021.  

Ambos equipo iban a dejar en el banquillo a varios pesos pesados. Canales o William en el Betis y Messi, De Jong y Pedri por el conjunto azulgrana.

El partido empezó con alta intensidad impuesta por los dos equipos. A ninguna de las escuadras les quemaba el balón y tanto locales como visitantes querían la posesión. Las bandas parecían ser las formas de ataque para hacer daño. Y por ahí llegó Alex Moreno para poner un pase al que no llegaba Borja Iglesias. 

El primer inconveniente se le presentó al técnico culé con la lesión de su central Araujo, entraba De Jong en su lugar.

Cuando el partido se asentó, fue Dembélé el protagonista del mismo. El extremo era un cuchillo por su banda y salía del regate tanto por la izquierda como por la derecha. El ambidiestro estaba desatado pero no encontraba el hueco perfecto para soltar su famoso latigazo al palo largo. 

El Barcelona consiguió que los de Pellegrini dieran un paso atrás y la baza de los nuestros era el contragolpe y la espalda de los defensas blaugranas como así sucedió en una muy clara para Juanmi. Fekir lograba zafarse en el centro de sus marcas y ponía un balón largo a Borja que con el rabillo del ojo se percataba de la internada de Juanmi por la izquierda pero el menudo delantero no conseguía dirigir su remate a puerta aunque se fue cerca. 

A los 28 de partido llegó la ocasión más clara del Barcelona que de forma inexplicable no entraba a gol. Un córner sacado en corto, acababa con un centro al corazón del área de Alba, Lenglet con todo a favor prácticamente pisando área pequeña y alzándose de forma poderosa remata fuera con Joel prácticamente batido. El francés ni se creía lo que acababa de pasar. 

Los de Koeman jugaban en el campo bético y los de Pellegrini se plantaban bien en sus posiciones. La idea bética era llegar cuanto antes al marco de Ter Stegen con los menos toques y en el menor tiempo posibles pero con el Betis tan metido atrás quedaba mucho trecho hasta el neerlandés. El contragolpe era ya de forma clara la manera de hacer daño de los nuestros. 

Por fin una contra salió perfecta. Un balón robado en defensa terminó en los pies de Juanmi, que combinó con Fekir en banda, el francés con Emerson, que entraba por la derecha. El brasileño profundizó y vio en  el centro del área a Borja Iglesias, que a placer, no perdonaba.

El Barcelona se vio sorprendido pero no bajó los brazos y Dembélé seguía intentándolo con velocidad y desborde. La defensa del Betis desmontaba uno tras otros los ataques que enfrentaba. Esa efectividad defensiva sería totalmente otra cosa en la segunda mitad, los goles de los visitantes llegaron más por demérito bético que por mérito rival, sin quitarle a los blaugranas la superioridad con la que jugaron en el segundo acto, pero los goles fueron muy evitables.

Koeman movió el banquillo en la segunda mitad dando entrada a Pedri. El pelirrojo entrenador sabía que necesitaba a sus cracks para voltear la situación.

Dembélé siguió su línea de la primera mitad y entraba por su banda como cuchillo en manteca, ponía un pase a Mingueza que se encontraba con Joel para salvar el gol. 

Los porteros de los grandes equipos suelen trabajar poco pero si están en esos grandes equipos es porque son grandes porteros y eso demostró Ter Stegen. Una genialidad de Fekir provocaba el uno contra uno de Juanmi frente a Ter Stegen. El arquero le comió la tostada al delantero y con una mano despejaba a córner cuando el técnico que maneja el luminoso estaba prácticamente encendiendo el dos. 

En ese mismo córner, Mandi pedía penalti por un pisotón de un defensa blaugrana, y no era cierto, no fue un pisotón, fueron dos, tanto Pjanic como Busquets clavaban sus tacos en el talón del central bético sin que el árbitro señalara nada ni el Var lo avisara tampoco. 

 Justo después entraba Messi al campo y la historia cambió por completo. A los dos minutos de estar en el verde, el argentino empataba el partido. Es el futbolista más desequilibrante del fútbol actual y de los últimos quince años, por lo menos. Dembélé desde su banda le cedía, entre dos defensas, el balón a Messi que pisaba área y arrancaba el césped del suelo con su tiro raso pegado a la cepa del palo donde Joel no podía llegar del todo. 

Al Betis le llegó el gol en contra y una pájara de la que le costó salir. El asedio del rival era más que evidente y los béticos no sabían ni por dónde le venían los ataques.

El gol de los visitantes era lo siguiente en el guion y se veía de forma clara. En el 65, Mandi salvaba el segundo al tirarse al suelo para desbaratar la picadita de Dembélé sobre Joel. Pero en el 67 era inevitable. La típica pared de Alba y Messi volvía a funcionar para acabar con el catalán cediendo a Griezman delante de Joel, el francés se trastabilló y no conectó con el balón, Víctor Ruíz que se había quedado a rebufo marcando al delantero del Barcelona y no esperaba ese fallo del campeón del mundo francés, llegaba como un toro para tocar el balón e introducirlo en su propia portería. El Barcelona se ponía por delante por el influjo de Messi, como no podía ser de otra forma. 

El vendaval culé seguía vivo y el Betis seguía atosigado en su propio campo. Los de Koeman no echaron el freno. 

Uno de los pilares de Pellegrini es Fekir y el galo en los partidos grandes se crece. El 8 bético lleva unos partidos siendo jugador destacado, con más presencia en el verde y tirando de la calidad que atesora. Una vez más volvió a hacerlo. El francés agarró el balón en la banda izquierda y con un quiebro d cintura y calidad se fue de su marca, Busquets, que solo pudo correr detrás para derribarlo justo antes de pisar el lateral del área, por un pelo no fue penalti. La falta muy peligrosa se convirtió en el empate bético con el centro preciso del propio galo a la cabeza de Víctor Ruíz que se resarcía de su gol en propia meta. Empataba el Betis en una jugada aislada de ataque de los nuestros. 

El gol sirvió a Pellegrini para ir a por el partido definitivamente. Tello y Guido ya estaban jugando y el ritmo del partido iba in crescendo para los nuestros, los culés hacía tiempo que jugaban a ritmo muy alto. Después puso en el campo, Pellegrini, a Canales y Loren, y entonces la frescura y la caradura de los nuestros vieron la luz. 

La primera ocasión que provocó Canales fue justo al saltar al campo y a punto estuvo de suponer la remontada bética. Después dejaba a Loren solo con Ter Stegen con un pase en profundidad hacia el marbellí pero de nuevo salvaba el portero culé, de todas formas la jugada hubiera sido anulada por fuera de juego del canterano. El Betis terminaba el partido atacando a todo un FC Barcelona para arrebatarle los tres puntos en juego.

El punto era un botín muy sabroso para los nuestros, el partido pudo haberse ganado por lo visto en la primera mitad o también nos podríamos haber llevado un saco de goles en contra por lo visto en la segunda, así que con lo dispuesto en el campo el punto era bueno pero hasta el rabo todo es toro y más si el nombre del morlaco es FC Barcelona. No te puedes dormir porque si te duermes el pitón te llega hasta la garganta entrando por la ingle. Y eso le pasó a Víctor Ruíz, se durmió y Trincao, que no bragao, más rápido, más listo y más despierto en esa jugada, le robó el balón que tenía que haber terminado con un pelotazo del central verdiblanco en la avenida de La Palmera pero no fue así. El portugués colocó el balón dentro del arco de Joel con un cañonazo a la escuadra que dio en el larguero y bajó ya dentro de la portería, un golazo. 

El Barcelona jugó con cabeza los minutos finales y con el balón en su poder, que es la mejor manera de defenderse del rival. El Betis, sin oportunidad para poder crear ocasiones de gol porque ya no la olía, perdía así el primer partido de este 2021.

Real Betis: Joel; Emerson, Mandi, Víctor Ruiz, Álex Moreno; Paul (Guido Rodríguez 75'), Guardado; Ruibal (Rodri 65'), Fekir, Juanmi (Tello 75'); y Borja Iglesias

 FC Barcelona: Ter Stegen, Mingueza, Araujo (De Jong 11'), Lenglet, Alba; Busquets (Umtiti 78'), Pjanic (Trincao 57'), Riqui Puig (Messi 57'); Dembelé, Griezmann y Braithwaite (Pedri 46').

Goles: 1-0 (38') Borja Iglesias; 1-1 (58') Messi; 1-2 (67') Víctor Ruiz en propia meta; 2-2 (74') Víctor Ruiz; 2-3 (87') Trincao.

 Árbitro: Del Cerro Grande (Colegio madrileño). Amonestó a De Jong, Dembélé, Busquets, Víctor Ruiz.